8ª Copa Mundo CX: Van Aert y De Boer, ganadores finales

Vegascross: Van Aert, primer líder

Jingle Cross: Van Aert y Compton dominan Iowa

Valkenburg: Holanda festeja y España sueña

Koksijde: Cancelada por el temporal de viento

Zeven: Van der Poel, histórico

Namur: Van Aert y Van der Poel, puro arte

Zolder: Van Aert, sin oposición

Wout Van Aert levanta los brazos como vencedor en la Copa del Mundo de Fiuggi / © UCI

Nicolás Van Looy / Ciclo21

El mundial de Bieles está cada vez más cerca y cada pedalada de más o de menos que los grandes favoritos den de cara a la cita de Luxemburgo puede suponer –o eso creen ellos– la diferencia entre disputar la campaña 2017-2018 vestidos con el maillot arcoíris o no. Por ello, la cita de Fiuggi contaba con grandes e importantes ausencias en todas las pruebas y categorías, pero, seguramente, ninguna tan decepcionante para los (pocos) aficionados que han acudido a presenciar en vivo el regreso de la Copa del Mundo de ciclocross a Italia como la de Mathieu van der Poel, que se encuentra concentrado en Benicàssim y que ha argumentado que “viajar a Italia suponía perder tres o cuatro días de los diez que va a durar mi concentración en España”.

Estará, ahí no habrá problemas, en Hoogerheide la semana que viene, último gran test antes de la cita mundialista, pero de eso nos ocuparemos dentro de algunos días. Hoy tocaba inventarse un rival para un Wout Van Aert que, sin su gran rival en liza y tras la demostración de la pasada semana en Oostende quería hacer olvidar lo ocurrido en Otegem, una cita en la que, todo hay que decirlo, el ambiente es más festivo que competitivo y tan importantes de cara al triunfo final son las piernas como la cantidad de cervezas que cada uno dejó de tomar la noche anterior tras los fastos por los nacionales.

Toon Aerts tras su caída en Fiuggi / © UCI

Y fue Toon Aerts, campeón de Europa, el que intentó poner en aprietos a Van Aert desde el primer momento. El corredor del Telenet-Fidea Lions quiso repetir lo que ya logró el día de Año Nuevo en Baal y abrió un interesante hueco en el primer giro. Por detrás, era el francés Venturini el que tomaba el mando del grupo perseguidor llevándose a rueda, entre otros, a un Wout Van Aert que durante esos primeros compases de la carrera parecía estar evaluando si, con el mundial a la vuelta de la esquina, merecía la pena tomar según qué riesgos en un trazado tan peligroso como el transalpino, donde las placas de hielo eran trampas mortales como poco más tarde acabaría comprobando, para su desgracia, el propio Toon Aerts.

Aerts llegó a contar con algo más de diez segundos de ventaja en el segundo paso por la línea meta, momento en el Van Aert, aprovechando un resbalón de Meeusen, cambió el ritmo por detrás y se lanzó en su persecución. Una vez que los campeones del mundo y de Europa rodaron juntos daba toda la impresión que mientras el portador del maillot mejor corredor continental iba dándolo absolutamente todo, Van Aert se dedicaba a conservar y recuperar fuerzas.

Y así quedó demostrado poco después cuando, a placer, el líder de la Copa del Mundo se marchaba en solitario a por el triunfo. Aerts, por su parte, peleaba por seguir más o menos cerca del inalcanzable Van Aert, lo que provocó que cometiera algunos errores que no hicieron más que servir como aviso al drama que le esperaba poco más tarde cuando en la parte boscosa del circuito trazó mal la bajada y, resbalando incapaz de recuperar el control de su bicicleta, impactó de forma brutal contra un árbol con su hombro izquierdo teniendo que ser evacuado del circuito asegurando que “me duele el hombro como nunca me había dolido antes”.

Este es el momento del durísimo impacto de @ToAerts contra un árbol | https://t.co/CcPCRxaaDl #TelenetUCICXWC pic.twitter.com/bvlR89gCyk

— Ciclo 21 (@ciclo21) January 15, 2017

Por delante, el soliloquio de Van Aert sirvió al belga para llevarse un nuevo triunfo que le ha permitido sumar los puntos necesarios para alcanzar, de manera matemática, el triunfo final en la Copa del Mundo, por lo que, como él mismo reconocía después de la carrera, “podré ir a Hoogerheide sin ningún tipo de presión y podré centrarme ya únicamente en entrenar y preparar de la mejor manera posible el mundial, que es mi próximo y gran reto de la temporada”.

Por detrás, el alemán Marcel Meisen se alzaba con la segunda posición y Tom Meussen completaba el podio en un día en el que el campeón de España, Ismael Estebam, completaba una carrera enorme y estuvo a punto de meterse en el top 10 de la clasificación al terminar 12º a menos de dos minutos del vencedor.

Vos enamora y De Boer se lleva la Copa del Mundo

Mientras que todas sus rivales resbalaban, patinaban y caían en el helado circuito de Fiuggi, Marianne Vos, la renacida Marianne Vos, la elegante Marianne Vos, la invencible Marianne Vos, sencillamente bailaba sobre el hielo con la gracilidad y belleza de Tessa Virtue en aquella inolvidable y preciosa final de los JJOO de 2010 que sigue siendo, para muchos aficionados, el momento cumbre de la historia del patinaje sobre hielo.

La salida, sin embargo, no fue tan positiva para una Vos que, junto a su compatriota De Boer, tardó un poco en hacerse a las condiciones del trazado. Por su parte, Ellen Noble sí que parecía haberse adaptado rápidamente, pero la corredora americana no tardó en recibir la compañía de Eva Lechner y la amenazante Vos.

La holandesa no tardó en dar cuenta de la esperanza local y con un cambio de ritmo tremendo dejó atrás a la italiana y se marchó, ya en solitario, hacia un triunfo que, como ella misma reconoció después, no fue nada sencillo. “Hemos tenido carreras resbaladizas esta temporada, pero ninguna como la de hoy. El circuito estaba cubierto de hielo y ha sido complicadísimo”. Para la vencedora, la clave de su triunfo estuvo en “saber adaptarse a las condiciones del circuito y a las cambiantes circunstancias. Además, se ha hecho fundamental escoger la trazada buena, tener todo el material en perfectas condiciones y, sobre todo, no entrar en pánico”.

Mientras que la checa Katerina Nash fue de menos a más durante la carrera y finalmente se alzó con la segunda posición, Sophie De Boer se tuvo que conformar en esta ocasión con la tercera plaza del podio, aunque fue suficiente para llevarse el triunfo final en la Copa del Mundo a falta, todavía, de la última carrera que se celebrará la semana que viene en Hoogerheide, oportunidad perfecta para brindarle este importantísimo logro a la afición holandesa.

Iserbyt domina con otro top10 de Orts

Iserbyt fue el mejor en Italia / © Trofeo DVV

Eli Iserbyt, actual portador del maillot arcoíris de la especialidad, parece estar completando una inmejorable aproximación a la cita de Luxemburgo. Hoy, en Fuiggi, en un circuito que presentaba unas condiciones muy similares a las que, por el momento, se presentan en el trazado mundialista, el belga se ha impuesto con absoluta autoridad y superioridad.

Como sucedió poco antes en la prueba júnior, la salida estuvo condicionada por una caída en la que se vio involucrado uno de los grandes favoritos como lo era el italiano Bertolini. Mientras que al corredor de casa le tocaba empezar una remontada imposible, Iserbyt se marchaba por delante en compañía de su compatriota Quinten Hermans.

El campeón del mundo dejó atrás a su compatriota para, de manera autoritaria y sin dejar lugar alguno a la duda, adjudicarse el triunfo por delante de un Bertolini que demostró estar, al menos, al mismo nivel de Iserbyt, siendo capaz de reponerse a esa caída ya comentada para terminar segundo por delante de Quinten Hermans, que completó el podio.

Iserbyt, de esta manera, se adjudicaba en el helado trazado italiano su sexto triunfo de la temporada que, sin embargo, es únicamente el primero en lo que llevamos de Copa del Mundo (los Sub23 y los júnior sólo han estado presentes en cinco pruebas al no estar convocados a las dos carreras americanas y la suspensión de Koksijde) lo que permite al holandés Nieuwenhuis mantener el liderato en la general a pesar de su décima posición en la meta italiana.

Sin embargo, Hermans le ha recortado una bonita cantidad de puntos, aunque el holandés sigue manteniendo 45 puntos de renta sobre el belga y 54 sobre el italiano Bertolini, que es tercero con un punto de ventaja sobre el vencedor de hoy.

Por su parte, Felipe Orts volvió a meterse en el top 10 de la carrera al terminar en octava posición en un circuito que, como él mismo reconocía a Ciclo21 “estaba helado y decidí salir a no fallar. Creo que esa era la clave: no cometer errores”. El alicantino fue “de menos a más y aguantando sobre la bicicleta como podía, por lo que estoy contento con el octavo puesto ya que supone seguir, de manera constante, en el top 10”.

Pensando en el mundial de Bieles, donde las condiciones climatológicas pueden ser muy parecidas a las de hoy en Fuiggi, Orts explicaba que “no son condiciones que me vayan mal. Creo que se me dan bien por lo técnica que se hace la carrera, pero he de reconocer que me falta todavía experiencia en este tipo de situaciones”.

Una montonera arruina la carrera de Cullell y Feijoo

Cullell durante la prueba de Fiuggi / © Cedida por Jofre Cullell

La prueba Júnior, donde España tenía puestas grandes esperanzas después de los últimos y buenos resultados de sus dos hombres más destacados, Jofre Cullell e Iván Feijoo y en la que también se produjeron ausencias importantes entre las que, por supuesto, destacaba la del británico Thomas Pidckock (del que Sven Nys ya ha dicho que “es el próximo Sagan”) deparó, quizás, la sorpresa del día con el doblete en el podio a cargo de los franceses Antoine Benoist y Maxime Bonsergent.

Ambos se colocaron en cabeza de carrera desde el primer momento y construyeron una sólida ventaja con un hueco suficiente, pasada la mitad de la prueba, como para poder permitirse el lujo de estar centrados el uno en el otro sin necesidad de pensar, además, en lo que pudiese venir desde atrás.

Fue a tres giros para el final cuando Benoist abrió hueco respecto de su compañero de selección y marchó solo hacia el triunfo. Fue el momento justo ya que, por detrás, Bonsergent era alcanzado por el italiano Fontana y el líder de la Copa del Mundo, Toon Vandenbosch. El trío lo dio todo por dar caza a un Benoist que, sin embargo, se vació para mantener su ventaja y fue capaz, al final, de llegar a meta con 22 segundos sobre Bonsergent. Vandenbosch se tuvo que conformar, en esta ocasión, con la tercera posición.

Por su parte, los españoles tuvieron mala suerte en la salida ya que tanto Cullell como Feijoo se vieron involucrados en una montonera que condicionó el resto de su carrera. Pese a todo, el flamante subcampeón de España quiso sacar una lectura positiva de la carrera y explicaba que “pese a que hicimos una buena salida, tanto Iván como yo nos vimos envueltos en esa montonera a unos 300 metros de la salida. Yo, por fortuna, me pude levantar rápido, pero a Iván le costó un poco más”.

Es evidente que con tanto terreno perdido en un momento tan fundamental como lo es la salida, Cullell quedaba sin opciones de triunfo, pero “he cogido un ritmo con el que he ido adelantando a mucha gente. El primer paso por meta lo hice el 28º, por lo que haber sido capaz de remontar hasta la 13ª posición final es algo positivo”.

En cuanto al circuito, el corredor catalán explicaba que “estaba muy resbaladizo debido a que estaba helado y había muchas placas de hielo que complicaban mucho el trazado de algunas zonas. Pese a todo, nos vamos con muy buenas sensaciones y ahora ya nos toca centrarnos en preparar el mundial, una cita que parece que se disputará también en unas condiciones muy similares a las de hoy, por lo que competir en un circuito nevado y con hielo nos ha venido muy bien para ir acostumbrándonos”.

Por su parte, Feijoo se lamentaba porque «había hecho una buena caída. Cuando pasamos por el box rodaba sobre la séptima posición, pero hubo un frenazo por delante y con el hielo se produjo una caída que me dejó muy tocado el resto de la carrera«. En cualquier caso, el campeón de España quería ver el lado positivo del día. «Ha sido un buen entrenamiento sobre el hielo. Las sensaciones físicas han sido muy buenas, pero no hemos tenido nuestro día«.

CLASIFICACIONES

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