Gilbert, agotado, se toma una pausa

Giibert en una prueba de 2021 © Lotto

Redacción / Ciclo 21

Tras una decepcionante Milán-Sanremo y los abandonos en la Clásica E3 Harelbeke y la Gante-Wevelgem este pasado domingo, el ganador de la Vuelta Flandes 2017 y cuatro monumentos más se tomará un periodo de descanso necesario, tanto físico como mental. Gilbert espera estar de vuelta para las clásicas de las Ardenas, pero aún no es seguro como confirma su equipo Lotto.

«Hemos decidido con el equipo que me tome un periodo de descanso ahora porque no va nada bien», explica Philippe Gilbert. «Hace unas semanas que las cosas no van bien. Nos hemos tomado el tiempo de analizar todo lo que había que discutir y hemos llegado a la conclusión de que es una falta de frescura mental y física. Creo que se debe a todo el trabajo que hice después de mi caída en el Tour de Francia el año pasado. Sigo siendo humano. Trabajé mucho, sin un descanso decente realmente, porque durante las semanas de descanso de la bicicleta, estuve trabajando mucho con el fisioterapeuta u otros especialistas. En ese momento, me diagnosticaron mal la rodilla. No nos dimos cuenta de la gravedad de la segunda caída. Al final, fue mucho más grave de lo que pensábamos inicialmente. Tal vez debería haber interrumpido mi temporada 2020 en ese momento».

El excampeón del mundo asume sus errores. «Hay que saber que el viernes anterior a la Milán-Sanremo fue la primera vez que pude pedalear sin dolor de rodilla. Por lo tanto, ya han pasado once días. Tal vez esto sea también una explicación de que el cuerpo está haciendo una especie de descompresión después de tener que enfrentarse a tanto dolor. Durante este proceso, creo que he necesitado mucha más energía para dejar que el cuerpo se cure de lo que podría haber imaginado. Creo que ahora estoy pagando el precio de esto. Otro elemento importante es que este año he entrenado mucho con frío. Por supuesto, esto no ayuda con una lesión así».

Y explica todo su proceso durante estas semanas de temporada 2021 donde nunca se ha sentido a gusto. «Después del análisis, ahora me doy cuenta de que en la concentración del equipo en enero, todavía estaba al menos un 20 o 30% por detrás del nivel medio del grupo, creo. Así que pasé por un periodo de dudas, sobre todo porque me presionaba para estar listo para la Milán-Sanremo. Así que trabajé aún más para intentar volver. Hice un gran progreso físico desde la concentración, pero quizás fue demasiado rápido. Y ahora lo estoy pagando. En el Circuito Het Nieuwsblad conseguí un buen resultado, pero tuvo más que ver con la experiencia que con la forma. Al final, no he estado en mi mejor momento esta temporada. Ahora es el momento de dar un paso atrás y esto me permitirá superar el obstáculo. He llegado a un punto en el que mi forma ya no evoluciona. Estoy estancado y no puedo alcanzar el siguiente nivel. Cada año, normalmente subo de nivel y me hago más fuerte después de la París-Niza o la Tirreno-Adriático. Ahora, me mantengo en el mismo nivel. Entonces, el cuerpo ya no acepta la carga de trabajo ni el sistema de sobrecompensación. Cuando te encuentras en esta etapa, la única manera de dejar que tu cuerpo trabaje de forma natural, es darle un poco de descanso. En París-Niza, no tuve ni un solo día en el que tuviera las piernas para estar ahí arriba en la final. Sólo pude seguir. Lo mismo ocurrió en las carreras belgas. En torno a los 150 kilómetros, las piernas empezaron a doler. Normalmente, es cuando empiezo a ser capaz de marcar la diferencia».

Philippe Gilbert decidirá más adelante -junto con el equipo- si es posible volver a competir en las clásicas de las Ardenas, La Flecha Valona y Lieja-Bastoña-Lieja. «Mi idea es tener 4-5 días de descanso en la bicicleta y luego retomar poco a poco los entrenamientos. Las clásicas de las Ardenas siguen siendo una opción, pero aún es demasiado pronto para hablar de ello. En primer lugar, quiero sentirme al 100%, tanto física como mentalmente, para poder hacer un papel en los finales. Al fin y al cabo, para eso practico el deporte», concluye.