Nocentini, el vencedor más amargo en el Naranco

El italiano en el podio © elmundo.es

El italiano en el podio © elmundo.es

Ángel Olmedo Jiménez / Ciclo 21

El italiano Rinaldo Nocentini (Arezzo, 1977) ha decidido continuar su dilatada trayectoria profesional, abandonando el que ha sido en el que ha militado más temporadas (el Ag2r, con un total de diez campañas) y comprometiéndose, por un año, con los lusitanos del Sporting Clube de Portugal-Tavira, donde compartirá maillot, entre otros, con el español De la Fuente.

Del bravo escalador italiano se recuerda, sobre todo, su periplo como líder del Tour de Francia en 2009. El transalpino se adjudicó la preciada prenda tras concluir cuarto la etapa que culminaba en Ordino-Arcalis y que había partido de Barcelona, en la que se filtró en la escapada buena del día, que acabaría siendo rematada por el francés Brice Feillu.

Su mágico reinado concluyó en el transcurso de la decimoquinta etapa, la primera de los Alpes, con final en Verbier, en la que Alberto Contador superó a todos sus rivales. Aquella tarde, Rinaldo atravesó la meta, luciendo aún un amarillo que ya no le pertenecía, a 2 minutos y 36 segundos del hombre de Pinto que, a la postre, se alzaría con el triunfo definitivo en París (acompañado de Andy Schleck y el texano Armstrong, al que la investigación de la USADA le arrebataría, posteriormente, su posición). Nocentini concluiría en decimocuarta plaza, el mejor de sus resultados en sus dos únicas participaciones en la mayor prueba por etapas del mundo.

El toscano debutó como profesional en la estructura del Mapei, donde estuvo tres años, para recalar, posteriormente, en Fassa Bortolo. En la escuadra italiana permaneció la campaña de 2002, desde donde pasó un año en el Formaggi Pinzolo Fiave, en el que vencería el Giro de la Toscana.

A la luz de ese éxito, obtuvo una nueva oportunidad de firmar por tres años con el Acqua & Sapone, filas en las que se alzó con la victoria que motiva el comentario de hoy, la Subida al Naranco de 2005, así como con una etapa en la Vuelta a Polonia 2004, como mejores resultados. En 2007 inició su periplo con los franceses de Ag2r, el conjunto que le ha acogido y en el que, para el imaginario popular, siempre irá ligada su imagen.

Líder en el Tour

Líder en el Tour

La Subida al Naranco es una prueba cuya primera edición se disputó en el año 1941, aunque su recurrencia anual no se vio asegurada hasta 1981 (antes había sufrido dos importantes parones (el primero entre 1948 y 1959 y el segundo desde 1967 hasta 1980). A partir de 2011, se incluye dentro del recorrido de la Vuelta a Asturias, constituyendo la etapa reina y que decide, normalmente, el vencedor de la competición.

El mayor aliciente es la subida al Monte Naranco, de cinco kilómetros y medio, con una pendiente media del 6,9% y rampas de un desnivel máximo del 10%. El paso es conocido como cima Tarangu, en homenaje al bravísimo escalador José Manuel Fuente.

Aquel miércoles 15 de junio de 2005 se disputaba la vigesimonovena edición de la Subida al Naranco, que partía de Lugones, con un trazado de 162 kilómetros, y en la que el pelotón, como es habitual, esperaba la ascensión al monte para dilucidar quién sería su vencedor. La jornada obligaba a los ciclistas a franquear otras dificultades como el Orlé, la Coladona, el Padrón y La Manzaneda, pero el Naranco era, como es habitual, el punto definitivo de las aspiraciones de todos los favoritos.

El día fue muy movido desde el comienzo, gracias a los múltiples intentos de fuga de los hombres del Relax-Fuenlabrada. Al llegar al Naranco, el principal favorito era el colombiano de Barloworld, Félix Cárdenas, que iba acompañado de tres de sus compañeros hasta los últimos cuatro kilómetros de meta, pero pronto se vería que las fuerzas del escarabajo y los suyos no servirían para detener el empuje de los tres hombres más inspirados del día, nuestro protagonista, el búlgaro del Maia, Danail Petrov, y el español de Kaiku, Jon Bru.

El toscano se adelantó a sus compañeros de ataque y aventajó en dos segundos a Bru y en 9 a Petrov. El resto de ciclistas llegaron configurando un rosario de sufridores que demostraban la dificultad del coloso asturiano. Los favoritos apenas comparecieron en la lucha y solo el ruso Tonkov, que concluyó octavo, pudo salvar los muebles.

Galletti, en el asfalto

Galletti, en el asfalto

El broche dramático del día, que empañó cualquier tipo de celebración, lo puso el compatriota de Nocentini, Alessio Galletti, nacida en Pisa y ciclista del Naturino-Sapore di Mare de 37 años, que fallecía después de haber sufrido una parada cardiorrespiratoria en el transcurso del ascenso al alto de La Manzaneda.

No sería la única victoria de Rinaldo en territorio español puesto que, en 2007, y ya defendiendo los colores del Ag2r, batió en la tradicional subida de la Basílica de El Puy, donde finalizó el Gran Premio Miguel Induráin, a la dupla de los Caisse d´Epargne compuesta por Purito Rodríguez y Alejandro Valverde, a los que aventajó en tres y cinco segundos respectivamente.

Su mejor prestación, en suelo español, tras esas dos victorias fue el segundo puesto en la decimotercera etapa de la edición de la Vuelta a España del año 2013, donde tomó parte de la fuga del día, que atravesó el Rat Penat, y se presentó con opciones de triunfo en las calles de Castelldefels. El francés Barguil, del Argos, aprovechó un momento de indecisión entre los fugados y se alzó con el triunfo, con apenas siete segundos respecto de un grupo de seis hombres, en el que Rinaldo Nocentini fue el más rápido.

Ahora, en el ocaso de su carrera, Nocentini se marcha al Sporting Clube de Portugal-Tavira, un conjunto continental en el que sus oportunidades de brillar se reducirán de manera notoria respecto a estos últimos años. En todo caso, los jóvenes talentos portugueses siempre podrán presumir de rodar al lado de un hombre que lució el maillot amarillo en el Tour de Francia y que demostró, en reiteradas ocasiones, contar con un golpe de pedal envidiable.

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