Tania Calvo y Helena Casas: una dupla que marcó época

Calvo y Casas, ganadoras en Glasgow… y de la Copa del Mundo © UCI Track

Track Piste / Ciclo 21

Con la conversión de la velocidad por equipos femenina de una prueba de dúos a una de tres corredoras, esta disciplina, presente en el programa de los Mundiales desde Palma 2007 y en los Juegos Olímpicos desde Londres 2012, entra en una nueva fase de la que saldrán algunos de los países que han sido protagonistas en los últimos años.

Sin ir más lejos, España se despedirá de tener representación en esta prueba a partir de las próximas citas programadas -los Campeonatos de Europa 2020, si se celebra, o 2021, y la Copa de las Naciones-. Hoy en día, no hay una tercera fémina de garantías que acompañe a Helena Casas y Tania Calvo, por lo que ambas emprenderán nuevos caminos por separado. La catalana está en un periodo de reflexión, sin querer hacer manifestaciones, para ver qué hace con su futuro, y a punto de cumplir 32 años, tan posible es que se centre en pruebas individuales como el keirin como que incluso opte por una retirada a no muy largo plazo; la alavesa, entrada en junio en la treintena, nos dice que ahora mismo lo que quiere es “disfrutar de la bici sin ningún tipo de estrés, ni presión, pensando en el día a día”, lo que de momento pasa por estrenarse como fondista a nivel internacional este verano.

Sea como fuere, desde TrackPiste queremos rendir homenaje a una dupla que marcó una época dentro de la velocidad española durante toda esta década destacando su triunfo en la Copa del Mundo 2016-17, con dos victorias individuales en Glasgow y Apeldoorn, la medalla de plata en el Europeo de 2016, o su presencia en los Juegos Olímpicos de Río, saldada con el diploma olímpico debido a la séptima plaza.

Una década de éxitos

El debut de la pareja -con Helena como arrancadora y Tania en la segunda vuelta- se producía en el Europeo de Pruszkow 2010 y se saldaba con un tiempo de 35,178 que les valía la octava plaza. En esa misma temporada hay que destacar los 34,474 de la Copa del Mundo de Cali que les supondría su primera final, por el bronce, aunque no podrían superar a Francia, con lo que obtendrían la cuarta plaza. En el Mundial de Apeldoorn, décima posición.

Los resultados de la pareja española: en amarillo, medallas de oro; en gris, las de plata, y en marrón, las de bronce © Track Piste

La llegada de Juan Martínez Oliver a la selección supondría una progresiva mejora que se plasmaría en el Mundial de Melbourne cuando las dos corredoras intercambiarán sus posiciones, con Calvo primero y Casas después. En tierras australianas mejoraron su registro (34,276) pero la novena posición no les permitirá clasificarse para los Juegos de Londres.

En plena crisis económica federativa, la temporada 2012-13 no tuvo muchos momentos de protagonismo para la pareja española, aunque lograron meterse en su primera final absoluta, en la Copa del Mundo de Glasgow donde sólo cederían ante las británicas, pero con una nueva marca personal, 34.102, y una merecida medalla de plata. En el Mundial de Minsk por primera vez entraban en los diplomas, séptimas concretamente, y con un nuevo mejor registro, 34,086.

Progresión y regularidad

El velódromo mágico de Aguascalientes, sede de una de las mangas de la Copa del Mundo 2013-14, les permitió bajar por primera vez de 34 segundos, concretamente 33,173, en una temporada en la que casi siempre -Manchester fue la excepción- estuvieron entre las ocho mejores del Mundo, destacando el quinto puesto del Europeo y el sexto del Mundial.

La temporada 2014-15 fue la primera en su objetivo de clasificarse para los Juegos Olímpicos de Río, logrando un sexto puesto en el Europeo de Guadalupe -el único registro que tienen en una pista de 333,3 metros-, una nueva plusmarca de 33,100 en la Copa del Mundo de Guadalajara, una medalla de bronce en la de Cali al superar a Nueva Zelanda y un séptimo puesto en el Mundial de Saint Quentin-en-Yvelines, con lo que se ponía bastante favorable la presencia olímpica.

Pero había que confirmarlo en la segunda temporada clasificatoria que no podía comenzar mejor en el Europeo con un nuevo mejor tiempo (33,087), que ya no volverían a mejorar y que es el actual record nacional oficioso ya que nunca fue homologado. De Grenchen se iban con la cuarta plaza, tras ser superadas por Países Bajos en la final B. La regularidad en la Copa del Mundo, con un nuevo bronce en Hong Kong, ganando a Canadá, y la octava plaza en el Mundial de Londres suponían clasificarse para los Juegos Olímpicos, donde obtendrían ese diploma olímpico antes referido.

La mejor temporada

Calvo y Casas (i), subcampeonas de Europa en 2016 © Roberto Bettini/BettiniPhoto

Sin embargo, la mejor temporada de Calvo y Casas sería la 2016-17. Con muchas parejas descansando tras la cita olímpica, las españolas supieron aprovechar el momento para lograr la medalla de plata en el Europeo, cediendo solo ante Anasasiia Voinova y Daria Shmeleva. Posteriormente se impondrían en las Copas del Mundo de Glasgow y Apeldoorn, ganando a China y Países Bajos, respectivamente, siendo terceras en Cali lo que les valdría para llevarse el triunfo absoluto en esta competición. La temporada la remataban con el séptimo puesto del Mundial de Hong Kong.

Así llegamos a la temporada 2017-18, en la que la dupla española mantuvo su línea de regularidad entre las ocho mejores del mundo, con un quinto puesto en el Europeo… pero con un noveno en el Mundial de Apeldoorn -la primera vez que se quedaban fuera de las ocho mejores desde 2012-, aviso de que en la antesala de las dos temporadas preolímpicas, la presencia en Tokio no iba a resultar nada fácil. “Mejor ahora que en agosto, cuando estemos ya en la clasificación olímpica”, reconocía Casas.

Tanto es así, que de cara al Europeo de Glasgow volvieron a la antigua formación de la dupla, con Casas nuevamente haciendo la salida para ver si se podían limar algunas décimas, aunque el experimento no resultó tan esperanzador como se hubiera deseado, acabando en la séptima posición. En la primera manga de la Copa del Mundo, en Saint Quentin-en-Yvelines, el registro fue incluso peor, estando por encima de los 34 segundos y de la décima posición, concretamente undécimas.

Un objetivo complicado

Por ello, se volvió a recuperar la composición más exitosa, Calvo-Casas, pero estas dos últimas temporadas demostraron que el objetivo olímpico era realmente complicado y nunca estuvo al alcance de las españolas, cuyo mejor resultado fue el sexto lugar en el Europeo de Apeldoorn 2019, aunque ni en el Mundial de Pruszkow, novenas, ni en el de Berlín, undécimas, pudieron recuperar su presencia entre las ocho mejores de años anteriores.

El anuncio de la UCI de ‘equiparar’ la velocidad femenina a la masculina suponía el adiós a esta dupla que quizá en algunos momentos mereció más suerte, pero que dio muchos momentos de alegría al ciclismo en pista español y cuyo hueco tardará muchos años, pero que muchos años, en cubrirse.

Este estudio no habría sido posible sin la cuidada recopilación de tiempos hecha por nuestro seguidor y amigo Diego_JV. Gracias a la ilusión de personas como él, merece la pena el esfuerzo de seguir difundiendo el ciclismo en pista.


Comentar

Su dirección de correo electrónico no será publicada.Los campos necesarios están marcados *

*