11ª Tour Francia: La opinión de Herrada y Valverde

El paso del Tour de Francia por los montes Jura en el camino entre Vosgos y Alpes ha traído por fin el sol y el calor a la Grande Boucle, que cubrió hoy miércoles 187 kilometros entre Besançon y Oyonnax. Un terreno sinuoso y cuatro cotas en la parte final dejaron apenas treinta unidades en el pelotón perseguidor de Gallopin, ganador de etapa tras una postrera fuga.

El Movistar se dejó ver en varios frentes en el tramo final. Jesús Herrada atacó a 40 km de meta en la Côte de Choux (3ª) en busca de Elmiger (IAM), último superviviente de la fuga del día, y Bakelants (OPQ) y Roche (TCS), que lo probaron minutos antes. El conquense, en compañía de Gautier (EUC), alcanzó la cabeza y tiró de un grupo que nunca contó con más de medio minuto de margen, empeñados Orica y Cannondale en el sprint de grupo. José Joaquín Rojas (6º) fue el mejor español en la jornada.

DECLARACIONES

-Jesús Herrada (audio): «La verdad es que me ha venido bien el día de descanso. Es mi primer Tour y de momento estoy contento de cómo me están saliendo las cosas. Las piernas van respondiendo y parece que las fuerzas siguen estando. Y sobre todo hoy se ha notado mucho el calor. Somos un equipo, especialmente Alejandro, que quizás estamos más acostumbrados que el resto al calor y nos encontramos mejor. A mí este tipo de etapas no demasiado duras pero con repechos me vienen muy bien y la cuestión era estar en cabeza al final para entrar bien situados en la bajada. Estaba saltando gente y le he preguntado a Alejandro si me iba con ellos para tener gente por delante. Por eso he saltado, pero el objetivo principal era estar bien colocados en la bajada. La verdad es que esto es otro mundo. A ver si ahora con el calor y la montaña se tranquiliza un poco pero la primera semana fue de una tensión increíble. Agua, viento… aquí no te puedes descuidar ni un momento porque un frenazo o una caída te mandan para casa sin esperarlo».

-Alejandro Valverde (audio): «Es una alegría que al fin haya llegado el calor. Ha sido una etapa realmente dura pero la acabamos contentos. Hemos tenido que estar atentos todo el día para salvar lo mejor posible y tras el último puerto se ha bajado locamente. Me he dado cuenta de que Porte iba atrás, he visto cómo los Omega iban a arrancar y me he puesto a su rueda. Nos hemos ido hacia adelante unos cuantos, pero era muy dificil llegar. En un grupo reducido se podría disputar, pero lo que tenía que hacer hoy era no perder tiempo. Llevamos el cuerpo ya machacado y habrá que mantener la atención tanto mañana como en los Alpes. Esperemos poder encontrar buenas piernas y hacer un buen fin de semana».

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