Evenepoel apunta a la báscula y el Adriático

Evenepoel brinda en el Algarve © Deceuninck

Redacción / Ciclo 21

Remco Evenepoel ya piensa en sus próximos objetivos después de ganar en San Juan y Algarve que pasan por Tirreno-Adriático. «Esta carrera también es un objetivo para mí y también será mi última carrera antes de comenzar un período de preparación en altitud, en vista de los clásicas de las Ardenas y el Giro de Italia. No estaré en plena forma, pero quiero enfrentarme a la carrera de la mejor manera posible. La Tirreno es muy similar al Algarve, habrá dos etapas para los velocistas, donde nos centraremos en Fabio Jakobsen, dos finales en alto y una contrarreloj final, aunque más corto que la portuguesa. Creo que podemos aplicar las mismas tácticas: perder lo menos posible al principio y llegar al máximo el último día. Y tal vez, si puedes, incluso pegar un tiro antes de la cronómetrada… «.

No obstante, el prodigio belga de 20 años del Deceuninck es consciente de que la competencia no será la misma, según relata a WielerFlits: «Allí la lista de participantes será aún más fuerte que la del Algarve, también desde el punto de vista numérico, dado que al principio habrá más equipos del World Tour, pero eso significa que podré adquirir más experiencias. Definitivamente mantendré los ojos abiertos, veré cómo iré cuesta arriba y, mientras tanto, intentaré sacar el máximo provecho de mí mismo.

Y vuelve a incidir que como la mayoría de sus colegas de pelotón no está al ciento por ciento y que debe afinar más –Lefevere le llamó «gordo» el año pasado– su masa corporal. «¿Mi forma? Todavía no estoy a tope, pero es difícil de estimar. Luego, en el futuro, también podría enfermar y, por lo tanto, sentirme incluso peor que en Portugal. Pero también es cierto que aprendí a no alcanzar el pico demasiado rápido. Y debi prestar atención a mi peso: para el comienzo de la Tirreno-Adriático, debería perder un kilo y luego dos más en vista del Giro de Italia».

De Portugal y el Algarve se queda con su prestación en solitario vestido de amarillo, donde es el campeón de Europa y subcampeón del mundo ante un Dennis que fue su víctima en el país vecino. “El resultado que más me impresionó fue la victoria contrarreloj, relativamente corta y muy explosiva. Cuando vi cuántos vatios empujé en ese corto tramo, me di cuenta de que iba bien. Y el maillot de líder también me dio un impulso extra, tengo que admitirlo. Luego, estaba Rohan Dennis: es el campeón mundial y el mejor del mundo en la especialidad, creo que puedo estar orgulloso de poder vencerlo».

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