Gorka Sorarrain, del baloncesto al ciclismo en 2 años

Gorka Sorarrain (21 mayo 1996, Tolosa, Guipuzcoa, País Vasco) es el neoprofesional de más edad del pelotón profesional español a sus casi 27 años y sin duda el más atípico. Hasta 2019 jugaba al baloncesto y su primer contacto con los pedales fue con el rodillo pandémico del confinamiento. De su grupeta pasó a hacer 6:20 en la Quebrantahuesos pasada por agua de 2021 y de ahí a plantarse en la categoría elite y sub-23 como independiente en el exigente calendario vasco 2022. Baqué le fichó a mitad de campaña y ganó en Berriatua y Gernika. Ingeniero por las mañanas y ciclista vespertino y cuando hay competición, Sorarrain se repensó la oferta del Bai-Sicasal continental para dar el salto 2023 angoleño con estructura portuguesa. El pasado 22 de marzo ya fue 6º en la 1ª etapa de la Volta al Alentejo. Un rara avis en busca de su hueco.

Entrevistas anteriores: José María Martín / José Luis Faura / Nil Aguilera / Fernando Tercero / Abel Balderstone / Pablo Castrillo / Alejandro Franco / Javier Serrano / Rodrígo Álvarez / Joseba López / Mikel Retegi / Yago Aguirre

Gorka Sorarrain © BAI

Fernando Ferrari / Ciclo 21

-¿Cuál es su historia ciclista desde su primera carrera hasta su debut profesional?

-Es una historia bastante atípica, ya que debuté hace exactamente un año en el campo amateur con 25 años, sin equipo y sin ninguna expectativa. Empecé en el torneo Euskaldun como ciclista independiente y desde las primeras carreras vi que era capaz de llegar en el grupo delantero. Al mes y medio, me contactó el equipo Cafés Baqué, y ya con ellos, di otro paso adelante y empecé a disputar las carreras, donde conseguí mi primera victoria en Berriatua en junio. El proceso ha sido muy bonito, ya que ha sido un año de constante progreso y aprendizaje. He estado muy a gusto en este equipo, y además de hacer el calendario nacional, he tenido la oportunidad de competir en el Tour de la Manche (Francia) o en el Giro de Friuli (Italia). Mi intención era continuar en el campo amateur, disfrutando del ciclismo de competición, pero el calendario vasco-navarro tiene un reglamento estricto respecto a la edad (sub-27), y este año ya no he podido seguir competiendo en Euskadi, ya que cumplo 27 años en mayo.

-¿Qué ha sido lo peor y lo mejor de este proceso?

-Sin ninguna duda, lo peor han sido las caídas, muchas veces no dependen de ti y te ves involucrado en alguna montonera. Y lo mejor, ha sido el propio camino, ya que, siendo mi primera temporada, en un solo año he aprendido y he mejorado mucho, y el poder correr por la victoria ha sido algo muy bonito.

-¿Quién le dio la noticia, qué sensaciones tuvo y cómo lo celebró?

-Joseba Santamaria fue el que me contactó desde el Bai-Sicasal explicándome el proyecto que tenía el equipo y en un principio tuve dudas; ya que, aunque la categoría sea profesional, las condiciones no lo son. Para mí esto ha sido un hobby hasta ahora (aunque me lo tomé muy en serio) y trabajo como ingeniero, por lo que compaginar estas dos facetas teniendo que competir en Portugal lo veía difícil. Pero viendo que era una de las únicas oportunidades que tenía de seguir compitiendo de forma regular, fui planteándomelo hasta que finalmente acepté.

-¿Cómo se define como ciclista?

-Diría que soy un ciclista potente y rodador, que pasa bien la media montaña, y que se me dan bien las carreras tipo clásicas y con llegadas en grupos reducidos. Aunque, por otra parte, acabo de empezar en esto del ciclismo así que todavía mi perfil ciclista no esta del todo definido, y espero seguir explotando diferentes facetas.

-¿Qué espera de su primer año? ¿Objetivos?

-En este primer año quiero seguir con el progreso en el que vengo y ver donde está mi nivel en el campo profesional. El objetivo principal es seguir disfrutando del ciclismo, y respecto a objetivos deportivos, me gustaría poder estar en la disputa de etapas, y por que no, poder ganar alguna. Aunque sé que es muy difícil, hace un año lo veía imposible el ganar en el campo amateur, y lo pude hacer dos veces, así que, porque no soñar.

-¿Calendario 2023?

-En un principio la idea es hacer el calendario portugués, siendo la Volta a Portugal el objetivo principal del equipo, además de alguna carrera del calendario español, como la Clásica de Ordizia, Getxo o Vuelta a Asturias (las dos últimas todavía sin confirmar).

-¿En qué carrera le gustaría estrenarse?

-Por pedir, sería un sueño estrenarse en casa, en Ordizia. Ya va a ser un sueño poder participar en esta carrera, imagínate ganarla…

-¿Qué opina de la precocidad de Evenepoel, Ayuso o Rodríguez?

-Creo que es natural que salgan algunos casos extraordinarios como los que nombras por la profesionalización que se está llevando a cabo en el ciclismo de formación. Son gente con unas capacidades excepcionales, que ya están al nivel WorldTour a muy temprana edad. Creo que siempre ha habido estos perfiles, pero ahora es más fácil descubrirlos y poder explotarlos al máximo gracias a todos los datos que tenemos. Eso no significa que todos los ciclistas puedan llegar a dicho nivel a esa edad, la mayoría necesita recorrer un camino más largo para poder madurar. Por ello, creo que el campo amateur debería dar la oportunidad de poder competir a todos los ciclistas, independientemente de la edad.

-¿Cómo ve a su equipo?

-Es un equipo humilde que quiere hacer las cosas bien. Creo que podemos hacer un buen grupo y dar un paso adelante, intentando lograr alguna victoria.

-¿Con qué balance de su temporada estaría contento el 31 de diciembre?

-Con que pueda mostrar mi máximo nivel sin tener percances negativos y ver donde estoy, ya me daría por satisfecho. Quiero aprovechar todo lo que pueda de esta oportunidad.

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