Juegos Commonwealth pista: Australia domina con tres oros

Domingo 31 julio. 3ª jornada

Matt Richardson © birmingham 2022

Trackpiste / Ciclo 21

El aparatoso accidente del campeón olímpico de omnium Matthew Walls durante la prueba de scratch marcó el desarrollo de la tercera y penúltima jornada de los Juegos de la Commonwealth, en la que Australia se llevó tres de los cuatro títulos en juego, con Matt Richardson (velocidad), Kristina Clonan (500 metros) y Georgia Baker (puntuación), quedando para el neozelandés Corbin Strong el desenlace del scratch.

Una caída colectiva en la prueba tuvo un desenlace poco habitual, cuando Walls fue lanzado hacia el exterior de la pista, por encima de la balaustrada y golpeando a varios espectadores. Como consecuencia de ello tanto él como el galés Matt Bostock tuvieron que ser trasladados al hospital y varias personas del público fueron atendidas de cortes y golpes diversos. Ya a última hora de la tarde, Walls indicaba que no tenía heridas graves, solamente varios puntos de sutura, y manifestaba su deseo de que todo el mundo estuviera bien. Por lo demás, la prueba se decidió para los tres corredores que ganaron vuelta: el mencionado Strong, el escocés John Archibald y el gales William Roberts.

La final de velocidad tuvo como protagonistas a dos de los velocistas más destacados de lo que va de temporada, el australiano Matt Richardson y el trinitense Nicholas Paul, ganador ayer del keirin, con victoria para el primero en dos mangas. Ya desde el principio se vio que ambos eran los más rápidos, 9.445 para el americano y 9.598 para el oceánico, aunque Jack Carlin se quedaba a apenas una milésima del tiempo de Richardson. Las semifinales mostraron una gran intensidad ya que Paul tuvo que reponerse de una relegación en la primera manga y superar a Matthew Glaetzer en el desempate, mientras que Richardson también cedía ante Carlin en el primer enfrentamiento, para imponerse en los dos siguientes.

E incluso en la final B también hubo su dosis de polémica ya que Glaetzer ganaba el desempate ante Carlin, pero posteriormente era relegado por lo que el escocés se llevaba el bronce. Tras su éxito en la Copa de las Naciones, la australiana Kristina Clonan volvía a lograr un triunfo de alto nivel en los 500 metros, donde se hacía con el triunfo -récord de los Juegos incluido– con un tiempo de 33.234, seis centésimas menos (33-294) que Kelsey Mintchell, con la inglesa Sophie Capwell (33.522) completando el podio.

El último éxito de la jornada para Australia llegaba en la puntuación femenina, en concreto para Georgia Baker que, con 55 puntos, superaba a la escocesa Neah Evans, con 36, y a la galasa Eluned King, con 32. En una prueba en la que las diez mejores ganaron vuelta, Baker fue la más activa en los sprints, sobre todo en la segunda mitad, donde puntuó en todos, ganando los cuatro últimos. El último sprint fue decisivo para las medallas, ya que todas las ciclistas que habían ganado vuelta podrían haber entrado en el podio, aunque fueron Evans, segunda en dicha llegada, y King, tercera, las que se harían con las medallas.

La jornada se completaba con dos pruebas para tándems, la velocidad masculina, que se llevaban los galeses James Ball y Matthew Rotherham, y el kilómetro femenino que suponía el segundo oro de estos Juegos para las australianas Jessica Gallagher y Caitlin Ward.

CLASIFICACIONES

Sábado 30 julio. 2ª jornada

Podio de la persecución masculina © AusCycling

Trackpiste / Ciclo 21

Nueva Zelanda sigue en racha en los Juegos de la Commonwealth y a los dos oros de la jornada inaugural, le ha unido otros tres de cuatro triunfos en juego en el segundo día, a cargo de Bryony Botha y Aaron Gate (persecución individual) y de Ellesse Andrews (velocidad), completando el medallero del primer día Nicholas Paul, en el keirin.

Botha y la australiana Maeve Plouffe se presentaban como favoritas, ya que son dos de las pocas mujeres en el mundo que han bajado de 3:20 en la distancia. La neozelandesa ratificaba sus ambiciones y volvía romper la barrera en la clasificatoria, aventajando en dos segundos a su rival. Luego, en la final vespertina, la diferencia fue aún mayor (3:18.456 a 3:27.122), lo que significa que el intento de Plouffe de revertir la situación no tuvo el resultado esperado.  La escocesa Neah Evans completaba el podio al batir a la australiana Sarah Roy (3:25.050 a 3:28.079), en unas finales sin presencia inglesa.

En cuanto a la versión masculina, Aaron Gate, que está cumpliendo una temporada perfecta, era uno de los grandes favoritos, aunque lo que no se podía esperar es que su rival en la final fuese un compatriota, y más en concreto Tom Sexton, tras una serie de clasificación en la que los cuatro finalistas bajaron de 4:10. Gate no dio opción en la final a su compatriota (4:07.760 a 4:12.179), mientras que en la lucha por el bronce el australiano Conor O’Leahy era el vencedor ante el inglés Charlie Tanfield (4:09.311 a 4:10.423), por lo que los anfitriones se iban de esta prueba sin medallas, ni en mujeres ni en hombres. Destacar que Dan Bigham solamente puedo ser sexto (4:11.078).

El tercer oro de los ‘kiwis’ llegaba con Ellesse Andrews, doble medallista ‘inesperada’ ayer en las pruebas por equipos. En la clasificatoria, solamente podía ser sexta, con 10.869, frente a los 10.612 de la canadiense Kelsey Mitchell, la más rápida. Pero en cuartos de finales eliminaba a la también canadiense Lauriane Genest, remontando una derrota en la primera manga, y en semifinales, a la británica Sophie Capewell, segunda ‘cabeza de serie’. Mitchell, por su parte, llegaba a la final sin sobresaltos, pero se tuvo que rendir finalmente al gran torneo realizado por la neozelandesa, que se imponía sin necesidad de desempate.

El mal día inglés, que terminarían sin medallas, continuaba en la final B, en la que la galesa Emma Finucane remontaba un 1-0 de Capewell para completar el podio. Finalmente el keirin significó el triunfo de un Nicholas Paul que cada vez está a un más alto nivel, dominando en la final ante el escocés Jack Carlin y el malayo Shah Sahrom, que cumplió lo que había dicho de suplir a su compatriota Azizulhasni Awang.

CLASIFICACIONES

Viernes 29 julio. 1ª jornada

Oro para la cuarteta australiana © AusCycling

Trackpiste / Ciclo 21

Nueva Zelanda y Australia han sido dobles vencedores en las pruebas por equipos con las que han comenzado los Juegos de la Commonwealth 2022, cuyas pruebas de pista se celebran en el velódromo olímpico de Londres. Los ‘kiwis’ se llevaban la persecución masculina y la velocidad femenina, mientras que los ‘aussie’ conseguían el oro en la persecución femenina y en la velocidad masculina.

Los neozelandeses Aaron Gate, Jordan Kerby y Campbell Stewart se tomaron la revancha de la mala suerte que tuvieron en Tokio y en compañía de Tom Sexton se llevaban el triunfo en la persecución por equipos, superando en la final a Inglaterra, con Charlie Tanfield, Dan Bigham, Ethan Vernon y Oliver Wood (3:47.575 a 3:49.584). Los ‘kiwi’, que fueron los únicos que en la clasificatoria habían bajado de 3:50 (3:49.821), dominaron en todo momento a los anfitriones, que también mejoraron sensiblemente su resultado de los últimos Juegos.

Australia, en concreto Joshua Duffy, Graeme Frislie, Conor Leahy, Lucas Plapp y James Moriarty, tenía que limitarse a la lucha por el bronce frente a Gales, donde dominaba con claridad (3:50.403 a 3:53.525). A los ‘aussie’ les faltó medio segundo en la matinal para poderse meter en la final.

No obstante, se tomaban la revancha en féminas, con un 4:12.234 que suponía un récord de los Juegos de la Commonwealth, y les daba el oro a  Georgia Baker, Sophie Edwards, Chloe Moran y Maeve Plouffe, ante una Nueva Zelanda que tuvo que recurrir a su velocista Ellesse Andrews para completar la cuarteta tras la lesión días antes de Ally Wollaston. Bryony Botha, Michaela Drummond y Emily Shearman eran las otras tres integrantes del equipo que en la final no tuvo posibilidades (4:17.884), pero al que le debe valer más que de sobra con la plata en esas circunstancias.

Y es que la clave estuvo en haber superado por más de un segundo a una Inglaterra que estuvo muy por debajo de lo esperado al no meterse en la final. Con 4:17.096 a 4:18.892 superaban a Gales, por lo que Laura Kenny, Josie Knight, Sophie Lewis, Maddie Leech y Grace Lister subían al podio por el bronce.

Pasando a la velocidad por equipos, el trío australiano (Matthew Glaetzer, Matt Richardson y Leigh Hoffman) superaba claramente en la final al inglés, con Ryan Owens, Hamish Turnbull y Joe Truman 42.040 a 43.372, una marca que no es solo récord de los Juegos, sino que coloca a los oceánicos como los grandes rivales de Países Bajos a corto plazo.

El bronce, para el renovado trío neozelandés, con Bradly Knipe, Sam Dakin, Sam Webster, que derrotaba a Canadá en la final B: 43.856 a 44.573.

Finalmente, en la versión femenina, Andrews no acusó el cansancio de su ‘prueba inesperada’ y en compañía de Rebecca Petch y Olivia King se llevaban el oro, poniendo de manifiesto que han encontrado un equipo muy equilibrado y de futuro. Con 47.425, también récord de estos Juegos, superaban los 48.001 de Canadá, con Sarah Orban, Kelsey Mitchell y Lauriane Genest.

Y como pasó en la Copa de las Naciones de Glasgow, Gales estuvo por encima de Inglaterra, en esta ocasión con medalla de bronce para las primeras, con Rhian Edmunds, Lowri Thomas, Emma Finucane y Eleanor Victoria Coster, al superar a Australia, incluso con mejor tiempo que las americanas (47.767 a 48.123). Para las inglesas, una quinta plaza decepcionante y más cuando solo les faltaron tres milésimas para superar a las australianas y haber entrado en la final B.

La jornada se completó con dos pruebas de tándem, con los triunfos de los escoceses Neil Fachie-Stewart Lewis en el kilómetro masculino y de las australianas Jessica Gallagher y Caitlin Ward, en la velocidad femenina.

CLASIFICACIONES

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