Kenny Dehaes se impone en el GP Zottegem

Dehaes en el GP Zottegem

Nicolás Van Looy / Ciclo21

El belga del Lotto-Soudal Kenny Dehaes ha conseguido la victoria en la 80ª edición del GP Zottegem tras mostrarse como el corredor más rápido entre el cuarteto cabecero e imponerse a Antoine Demoitie y Oliver Naesen.

Pese a que algunos, casi inconscientes, lo intentaron, la enorme velocidad con la que el pelotón afrontó el inicio de la carrera (47 kms/h en la primera hora) no invitaba a que se formase la típica fuga que suele proveer de calma al gran grupo en casi todas las clásicas. En esta ocasión, sin embargo, hubo que esperar hasta los últimos 65 kilómetros para que un grupo de 14 corredores Kenny Dehaes, Brian van Goethem, Jelle Wallays, Oliver Naesen, Tom Devriendt, Kevin Callebaut, Joeri Stallaert, Rens te Stroet, Wouter Mol, Mark McNally, Elias Van Breussegem, Stef Van Zummeren, Olivier Chevalier y Antoine Demoitié consiguiera burlar el control del pelotón y se marchara con unos metros de ventaja que, poco a poco, se fueron convirtiendo en el hueco definitivo.

Un hueco que, pese a todo, nunca fue un colchón lo suficientemente amplio como para relajarse. Cuando entraron en el circuito final, al que deberían de dar dos vueltas para cubrir los 30 kilómetros finales, esa ventaja era sólo de un minuto respecto a un pelotón que siempre creyó que conseguiría neutralizar esa fuga.

El Paddestraat se erigió como el lugar donde se iba a realizar la criba definitiva. En el primer paso, sólo Van Goethem perdió contacto con los líderes, pero el pelotón, que seguía rodando tremendamente rápido en la persecución, saltó en pedazos, algo que permitió que las labores de caza se desorganizaran y los entonces 13 hombres destacados afrontaran la última vuelta con 1:15 de ventaja.

Cuando por detrás las cosas parecían volver a tomar cierto orden, Naesen, Dehaes, Demoitie y Van Breussegem decidieron jugarse su apuesta ganadora y abrieron un bonito hueco cercano de los 30 segundos respecto a sus compañeros de fuga. Van Breussegem tuvo que dejar marchar al resto en el último paso por los adoquines del Paddestraat, pero el trío, consciente de que sólo colaborando entre todos iban a ser capaces de llevar la aventura a buen puerto, decidieron esperarle para afrontar juntos el tramo final.

Así, llegaron a la recta de meta para disputarse la victoria en un sprint a cuatro en el que Dehaes se mostró como el corredor más rápido. El de Lotto-Soudal tomó las riendas de la situación desde lejos y lanzó el sprint cuando parecía que iba a ser demasiado pronto. Sólo Demoitie pudo contestarle y, aunque por momentos pareció que acabaría superando a su rival, finalmente se tuvo que conformar con la segunda posición. Oliver Naesen completó el podio.

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