La doble cara del Cannondale

La bronquitis merma a Urán en el Giro © Cannondale

La bronquitis merma a Urán en el Giro © Cannondale

Redacción / Ciclo 21

Colombia es un país rico. También en ciclistas profesionales incubados en las altitudes andinas incluso superiores a los 3.000 metros que provocan un buen número de talentos al pelotón internacional. Y allí sueñan ahora con la prestación de Esteban Chaves en el vigente Giro de Italia -segundo en la general provisional- y con la que pueda tener Nairo Quintana -ganador en Catalunya y Romandía- en el próximo Tour de Francia. Pero otros muchos sueñan con lo que aún pueda hacer en la semana final el ya experimentado y bragado Rigoberto Urán que aspira ya a una etapa y poder entrar en los diez mejores, posición que perdió tras una floja cronoescalada en Alpe di Siusi, cediendo más de 3 minutos sobre el sólido líder Steven Kruijswijk, y acusando sus problemas de bronquitis en la reanudación de Andalo.

El actual subcampeón olímpico de fondo en carretera -perdió el oro ante Vinokourov en Londres 2012- fue o es la gran apuesta para las grandes vueltas del equipo estadounidense Cannondale, que dirige el peculiar exprofesional Jonathan Vaughters -debutó en el conjunto español Santa Clara-, pero de momento el sudamericano no está respondiendo a las expectativas después de las dos primeras semanas de gran ronda italiana en la que ha ido desinflándose. No obstante, es un hombre que siempre se ha distinguido por ser un gran fondista y tener una muy buena tercera semana de competición, donde otros sucumben. Ante él -y los demás- viene la traca final de la siempre exigente montaña septentrional transalpina, perfecta para dar vuelcos en la clasificación como la dieron Chaves y Kruijswijk en los Dolomitas. Repetir sus dos segundos puestos finales ya es casi tarea imposible, pero una etapa colmaría sus esfuerzos y el de sus compañeros, uno de los pocos equipos que conserva a sus nueve efectivos. Su enfermedad respiratoria ha mermado sin duda sus puntos de mira en la salida de Apeldoorn.

De momento en su agenda está posiblemente el Tour de Francia y los Juegos Olímpicos de Río donde la dureza del recorrido le va de perillas. “Yo he dicho que mis dos objetivos este año son el Giro de Italia y los Olímpicos. Esta vez vamos a ser cinco colombianos en la carrera: Nairo, Esteban Chávez, Sergio Henao y otro que falta por definir. Es un equipo muy poderoso. En 2012 fuimos tres y conseguimos un gran resultado. Además, ya vi el recorrido y nos favorece, así que espero que podamos quedarnos con la medalla de oro”.

Un ciclista, por otra parte, amante de las redes sociales, donde se muestra muy activo de cara a los miles de seguidores que tiene por todo el mundo. “La verdad es que me gusta y trato de ser original en las redes sociales, pero lo que más me ha sorprendido es la respuesta de la gente cuando no estoy ganando. Por ejemplo el año pasado, recibí mucho más mensajes cuando no estuve en las posiciones esperadas. Fue sorprendente y gratificante a la vez. Por eso me gusta comunicarme con los fanáticos de esa manera”, como expresó en la BBC.

Skujins celebra su éxito © Cannondale

Skujins celebra su éxito © Cannondale

La cara positiva del conjunto que patrocina la conocida marca de bicicletas Cannondale -antes con estructura italiana- fue la dada en el reciente Tour de California con dos brillantes victorias de etapa. Los maillots verdes se dejaron ver en la prueba que se llevó el francés de 23 años Julian Alaphilippe. Así Ben King fue el mejor en la segunda etapa tras constituirse en el mejor de la fuga que el pelotón no pudo neutralizar. El norteamericano le arrebató ese día el maillot amarillo a Peter Sagan, vencedor en la víspera. No obstante King la perdió al día siguiente en el final en alto donde el galo sentenció la ronda 2.HC UCI. No fue la única alegría porque tres días después fue el talentoso letón Tom Skujins el que se llevó la 5ª etapa superando al canadiense De Vos y al navarro Xabier Zandio en otra fuga que pudo llegar a buen puerto.

Son las dos caras de un Cannondale que tiene una semana importante para rematarla con Urán u otro de sus compañeros -como el pujante Dombowski o la esperanza italiana Formolo– en un Giro de Italia abierto para triunfos parciales y estrategias donde Vaughters -apoyado en la dirección deportiva por el español Bingen Fernández- sueñe moverse con soltura.

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