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El Muro todavía no sabe cuándo volverá a ser visitado por el pelotón / © Getty
La reorganización del calendario internacional, en el que la inmensa mayoría de los organizadores de las carreras no definitivamente canceladas hasta 2021 quiere colocar sus pruebas en otoño, se ha convertido en una auténtica selva en la que parece que sólo los más fuertes podrán salirse con la suya.
En ese sentido, no cabe duda de que Flanders Classics es una de las empresas que parte con ventaja en esa pelea y que la Vuelta a Flandes será, sin duda, una de las carreras que encuentre sitio, sí o sí, en esa apretada nueva agenda.
En ese sentido, tal y como adelanta Het Laatste Nieuws, los organizadores de De Ronde manejan el día 19 de septiembre como fecha para la celebración de pospuesta edición de 2020. En ese sentido, parece que los responsables de Flanders Classics estarían trabajando en un acuerdo con la organización de la Primus Classic para que esta última renuncie a su celebración y, de esta manera, deje libre ese sábado de septiembre.
De esta forma, la Vuelta a Flandes se convertiría, por fechas, en el Monumento que daría la bienvenida al otoño de la misma manera que, en circunstancias normales, hace la Milán-Sanremo con la primavera.
En cualquier caso, la fecha elegida no está exenta de problemática ya que ese 19 de septiembre coincide con el primer sábado del Campeonato del Mundo de ciclismo en ruta, por lo que parece difícil que la UCI vaya a aceptar ese trato entre Flanders Classics y la Primus Classic.
Por ello, esta idea no es más que un plan B de la organización de De Ronde ya que la opción principal sigue siendo esperar a que la UCI mande su propia propuesta de reorganización del calendario.
«Efectivamente, ya ha habido conversaciones», confirma Philip Beke, vicepresidente de la organización de la Primus Classic, a Het Laatste Nieuws. “Es posible que queramos extender una mano amiga y entregar nuestro lugar en el calendario por una vez, aunque a condición de que nuestros patrocinadores también estén de acuerdo”, zanjaba.
Además, Beke confirmaba que esa entrega no sería en forma de regalo. En ese sentido, cabe recordar que su empresa, Impanis-Van Petegem, es una sociedad sin ánimo de lucro. Beke confirmaba que, de llegarse a un acuerdo, este tendría que incluir una compensación económica a su empresa.
