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Pepi Benítez y Judith Masdeu © FB Noel Martín
Pepi Benítez es la protagonista, en esta ocasión, de las entrevistas que Noel Martín está realizando con el fin de dar a conocer un poco más a los ciclistas que practican la modalidad de “adaptado”.
Pepi Benitez es la única chica de la selección junto a su piloto Bea Gomez, ya que desde 2014 no compite Raquel Acinas. Una chica siempre alegre, con unas enormes ganas de hacer cosas en el ciclismo a pesar de que ya lleva muchas batallas encima, buenas y malas… pero que tiene Río en mente y seguro que estará allí luchando por las medallas.
Para Noel Martín, este es «un @tandemfemenino que me cayó especialmente bien desde el principio y con el que espero seguir haciéndonos selfies durante muchos años».
-Preséntate al gran público y di con quién te gustaría salir un día en bicicleta.
-Soy Josefa Benítez, conocida como Pepi o Pepita, ciclista paralímpica. Debido a mi problema visual me es imposible competir sola, y lo hago en la categoría de tándem, junto a mi compañera Bea Gómez. Ella son mis ojos encima del tándem y un gran apoyo en los desplazamientos. Si pudiera elegir con quien salir en bici, me quedo con Peter Sagan. Iría encantada si me hiciera de piloto…
-¿Cuál es tu «discapacidad» física? ¿Cómo ocurrió?
-Mi discapacidad es visual. Nací con cataratas congénitas y desde los 2 añitos iba pasando por el quirófano, porque a medida que yo crecía la catarata también, y me mermaba más el poco resto visual que tenía. Luego ya a los 28 años sufrí un desprendimiento de retina con agujero macular en mi ojo dominante, y pasé a ver solo sombras. Mi resto visual empeoró muchísimo y a partir de entonces, el ojo gandul se convirtió en el que tenía que dominar. Poco a poco gané algo de visión para defenderme dentro de mis posibilidades en el día a día.
-¿Por qué decidiste ser ciclista?
-Siempre me ha gustado practicar deporte, desde los 14 años ha formado parte de mi vida. Empecé con balonmano, baloncesto, donde calculaba donde iba a caer la pelota, a veces acertaba y a veces no. Luego ya me pasé a deportes individuales como la esgrima, donde no veía la hoja del florete pero seguía el movimiento de la mano. Llegué a quedar 3ª de Cataluña y 3ª de España, pero luego ya empeoró mi visión y ya la táctica que empleaba no me servía. Dejé el deporte unos años y regresé en atletismo, y de ahí, un día me comentaron lo del tándem, porque el tema ciclismo siempre me ha gustado pero por mi resto visual lo tenía descartado, y asi me inicié en el ciclismo y me quedé atrapada.
-¿Qué es lo que te ha dado la bicicleta para que te olvides de tu «discapacidad»?
-La bicicleta me ha brindado la oportunidad de competir y llegar a ser deportista de élite. Esto para mí representa el experimentar las mismas sensaciones que cualquier otro deportista de alto nivel, no importa mi discapacidad, me olvido de ella. Gracias a Bea, que comparte estos momentos conmigo, cuando compito en tándem me siento plena y me entrego no al 100% sino al 200% porque hay otra persona que confía en mí y dependemos una de la otra.
-¿Qué es lo que más te gustaría conseguir como deportista?
-En sí ya lo conseguí en Londres: plata en unos JJPP. Aun hoy miro la medalla y no me lo creo, y ya han pasado casi 4 años. Como soy una inconformista luchadora en los JJPP de Río me gustaría conseguir medalla de oro. Porque para mí, el ir a unos JJPP es un premio, y el subir al podio, una recompensa al sacrificio diario durante 4 años.
-¿En qué momento te bajaste de la bici y dijiste: «hoy todo el sacrificio ha merecido la pena»?
-No me hace falta ni pensarlo: el momento de cruzar la meta que en los JJPP de Londres 2012, y conseguir ser Silver Medal.
-¿Qué cosas mejorarías del ciclismo adaptado?
-Para mi categoría, tándem, creo que sería importante incrementar las competiciones, tanto de pista como de ruta, porque para coger nivel y chispa, aparte de los entrenos hay que competir, y nosotros los deficientes visuales o ciegos no podemos competir solos para coger ese punto. Y que en todas las competiciones participase al menos un ciclista de cada categoría, tanto masculina como femenina.
-¿Qué aficiones tienes fuera del deporte?
-Ver partidos de basket de mi hija, viajar, cocina de repostería, pero en el día a día y con los entrenos, la verdad, no me sobra demasiado tiempo.
