¿Qué otra táctica le queda a la selección española?

La selección española elite masculina © RFEC

Posiblemente a final del año en marcha, cuando miremos atrás, pensaremos en el Europeo como una de las carreras más bonitas de la campaña, aunque seguramente, nos vayamos a otras carreras, más trascendentes sobre el papel, a la hora de elegir las mejores.

Sin embargo, lo que vimos en Trento, hasta el mismo desenlace entre Colbrelli y Evenepoel, tuvo un primer punto de dureza en la salida que protagonizó la selección española junto, especialmente, a la francesa.

Lo cierto es que el europeo de Trento fue una carrera muy corta para como suelen ser estas pruebas, pero ello no le quitó un ápice de emoción y ganas.

Había hambre de ciclismo y de salida se vio.

La selección española participó de esa locura de inicio con Antonio Jesús Soto y luego con casi todo lo demás.

Pluriactivo Roger Adrià, el mejor al final, y presencia en el corte de cabeza con David de la Cruz, Gorka Izagirre y Mikel Landa, quien no tardó en quedarse para poner guinda un año muy triste para el alavés.

A diferencia de la selección española, la francesa tenía buenos currantes, Thibaut Pinot entre ellos, y luego dinamita para el final en la persona de Benoit Cosnefroy.

Así las cosas mucha gente se preguntó por la estrategia de la selección española en Trento que no fue otra que plantear algo diferente para ser, al menos, protagonistas en un tramo de carrera y no acabar diluidos al final.

Artículo completo en El Cuaderno de Joan Seguidor

Comentar

Su dirección de correo electrónico no será publicada.Los campos necesarios están marcados *

*