Ciclo21 Portal de ciclismo
Kuss ha brillado en 2020 / © ASO
Sepp Kuss (Jumbo-Visma) ha sido uno de los corredores que, dentro del grupo de los no ganadores, más a brillado esta temporada. El escalador americano ha dado sobradas muestras de que, al menos por potencial, está listo para dar un nuevo paso adelante en su carrera deportiva.
Si dispondrá de la oportunidad en su actual equipo, con el que termina contrato al final de 2021, es una incógnita. Primoz Roglič es, por derecho propio, el líder natural del conjunto neerlandés en las grandes vueltas; pero Kuss está ya, sin duda alguna, en disposición de pelear la condición de segundo al mando a otros corredores como Tom Dumoulin, George Bennett o Steven Kruijswijk.
Él mismo reconoce, en una entrevista concedida a Ciclismo Internacional, que sus aspiraciones han crecido tras este fenomenal 2020.
Una de las pruebas donde más brilló fue el Tour de Francia, donde la victoria final de Roglič se escapó en la crono final de la Planche des Belles Filles. Respecto a la Grande Boucle, Kuss asegura que “fue toda una experiencia. Encima fue como parte de un gran equipo y peleando el título, nunca lo olvidaré. Cada corredor de Jumbo estuvo a un nivel altísimo, así que fue muy emocionante estar allí en las etapas de montaña. Nunca hubiera creído tener el nivel para eso”.
En ese mismo sentido, considera que 2020 ha supuesto un nuevo paso adelante en su maduración como ciclista. “Ahora que he hecho más carreras y sobre todo de tres semanas, sé qué esperar y eso me ayuda a estar concentrado y confiado. Además siento que me he ganado un lugar en el pelotón y puedo estar adelante en los momentos clave, pero no puedo estar muy relajado”.
Kuss cree que “por lo que mis sensaciones indican, soy un hombre de segundos esfuerzos. Parece que lo hago mejor en la segunda parte de la temporada, una vez que tengo más entrenamientos y carreras en las piernas. Y eso no significa que no entrene en pretemporada pero siento que mi motivación y forma crecen a medida que pasan los meses”.
Confrontado a la posibilidad de asumir el liderato del equipo en alguna carrera en 2021, el americano es claro. “¡Eso espero! Me encantaría hacerlo en carreras como Volta Catalunya, Itzulia y La Vuelta, pero ya veremos cuáles son los planes para 2021. Además, quiero ver qué puedo hacer en carreras por etapas con más escalada. Eso no quita que esté comprometido a dar el 100% para el equipo en citas como el Tour, pero realmente espero tener mis opciones en otras carreras”.
Respecto a las críticas que despertó la manera de correr, para algunos poco ambiciosa, del equipo Jumbo-Visma en el Tour, el corredor americano asegura que “corrimos como más nos convenía en el Tour. Sabíamos que la crono final iba a ser decisiva y corrimos para mantener las diferencias de cara a ese día, salvando energías al controlar los días previos a la etapa 20. A Primoz no le molesta si hay muchos ataques lejos de meta, pero si usamos nuestra fortaleza colectiva con el tren de montaña también se puede beneficiar de las bonificaciones. Admito que no es el modo más atractivo de correr, pero en el Tour el nivel es tan alto que eso solo frena a todos -o casi todos- los interesados en atacar. Más si hay uno o dos equipos muy fuertes”.
Pese a todo, Kuss reconoce que la derrota no fue fácil de digerir. “Fue muy raro. Estaba un poco conmocionado, pero intenté mantenerme positivo. Quizás fue más fácil para mí porque estaba en mi primer Tour y estaba feliz por lo realizado, corriendo con los mejores casi siempre. Fue complicado ver la decepción en directores y staff, que prepararon todo el año la carrera. Me sentí mal por Primoz, que quizás pensó que nos defraudó, pero aún así él hizo una buena crono. Lo de Pogacar fue excepcional. Cada uno de nosotros estuvo orgulloso de exprimirse por un líder como Primoz”.
