Valverde estrenó la Collada de la Gallina en 2012

https://www.youtube.com/watch?v=-TA6YtiWB-c

Ángel Olmedo Jiménez / Ciclo 21

En la presente edición de la Vuelta a España, los corredores tendrán que enfrentarse a dos ascensiones calificadas como de categoría especial, la Ermita de Alba (en la etapa decimosexta, justo antes del segundo día descanso) y la Collada de la Gallina (en la undécima jornada, tras el primer parón, en una durísima etapa en la que a la citada Collada le anteceden Beixalis, Ordino y la Rabassa y, tras coronarla, Comella y el final en Els Cortals d´Encamp).

La llegada del equipo capitaneado por Javier Guillén a la dirección de la Vuelta en octubre de 2008, coincidió con una apuesta de renovación de la prueba en la que los finales en cuestas de pendientes pronunciadas y la búsqueda de nuevos puertos (Cuitu Negro o la Bola del Mundo), así como trayectos de distancia más reducidas, fueron el mascarón de proa. Con ello, la prueba concitó un mayor interés mediático.

En esa espiral, en el año 2012, se anunciaba la subida al, por entonces, inédito puerto de la Collada de la Gallina (de 7,5 kilómetros de longitud y un desnivel medio del 8,3%, pero con mortíferas rampas que alcanzan hasta el 18% y con unos cuantos kilómetros aún sin asfaltar en su cima).

La edición de dicho año se presentaba como una auténtica batalla entre lo más granado del pelotón nacional. “Purito” Rodríguez (Katusha), Alejandro Valverde (Movistar) y Alberto Contador (Saxo Bank – Tinkoff) habían marcado, por diferentes motivos, la Vuelta como momento de mayor lucimiento de su temporada (el murciano, que retornaba a la competición tras su sanción por dopaje [impuesta por el TAS tras la investigación del CONI] había acabado vigésimo en el Tour, venciendo en la etapa de Peyragudes y ya contaba con la general de la Vuelta a Andalucía; el pinteño había retornado de su sanción por dopaje en agosto, en el Eneco Tour, y Joaquim venía de rozar la maglia rosa, en el Giro que le arrebató Ryder Hesdejal en la última crono de Milán, y de alzarse con la victoria en La Flecha Valona, además de ser segundo en la general de la Vuelta al País Vasco). Euskaltel confiaba en las opciones de Igor Antón y Movistar, además del murciano, contaba en sus filas con el ganador del último año, Juanjo Cobo.

El elenco de participación se completaba con una nutrida representación foránea, entre la que descollaban Chris Froome (el británico del Sky que había quedado segundo en el Tour de Francia, siguiendo las órdenes de su equipo, en favor de Wiggins), los holandeses Robert Gesink y Ten Dam (de Rabobank), Philippe Gilbert (BMC), que se haría con el arcoíris en el Mundial de ese año, y el norteamericano Andrew Talansky (por parte del Garmin).

Valverde se impone a Purito y Contador

Valverde se impone a Purito y Contador

La carrera comenzó movida, siendo el primer portador de la Roja, el contrarrelojista de Movistar, Jonathan Castroviejo, al ser el elegido por su equipo, que se alzó con la victoria en la crono por equipos de Pamplona. El liderazgo cambió de manos, pero no de equipo, en la tercera etapa, que ascendía a Arrate, donde el murciano Valverde se impuso con autoridad, pero su alegría fue ínfima, ya que, al día siguiente, en la subida a Valdezcaray, Purito Rodríguez se hizo con un primer puesto que solo le arrebataría, de manera definitiva, Alberto Contador en la más que épica etapa de Fuente Dé.

No obstante, en la página histórica que hoy rememoramos, la incertidumbre ser cernía entre los corredores por la llegada de este nuevo coloso, la Collada de la Gallina, que se alzaba como la primera dificultad montañosa, de gran entidad de la prueba. La jornada imponía cumplir con 175 kilómetros, con inicio en Lleida, y obligaba a franquear el puerto de segunda categoría de la Comella antes de afrontar la novedosa cima.

La general, a esa fecha, se encontraba muy abierta, ya que Purito apenas aventajaba en 10 segundos a Froome, en 35 a Contador y en 54 a Gesink y Valverde. Entre el primero y el décimo (el colombiano Henao) no existía más de 1 minuto y 39 segundos. Con esa panorama no es de extrañar que los favoritos pelearan, y mucho, en la ascensión a la Gallina. Por delante, circulaba una escapada en la que rodaban Meyer, de Orica, los franceses Moinard de BMC y Buffaz de Cofidis y el español Ramírez Abeja, con una ventaja, a pie de puerto, que rondaba los dos minutos.

En el pelotón tiraban los Sky, con un australiano Richie Porte que recordaba sus increíbles prestaciones en el Tour de Francia, imponiendo un ritmo que tuvo continuidad con los colombianos Henao y Urán y que, en apenas dos kilómetros, había limado un minuto a los escapados. Ante la proximidad de los gallos, los escapados cesaron su colaboración y comenzaron los ataques. Primero, Ramírez Abeja se marchó por delante pero su intentona fue baldía. Después, Meier se lanzó en una de las rampas más duras y abrió una pequeña brecha sobre sus compañeros.

Las hostilidades para los hombres de la general comenzaron cuando restaban algo menos de 4 kilómetros, momento en el que el maillot blanco, Alejandro Valverde, demarró con un fuerte ataque. Por detrás, la reacción se hizo esperar, mientras los capos se miraban entre ellos. Fue Froome quien respondió y a su rueda se fueron Contador y el líder, acompañado de Dani Moreno.

Al poco de cazar, Froome forzó la máquina y con su acelerón puso en graves aprietos a Purito y Valverde, siendo que solo Contador se pegaba a la rueda del Sky. El incremento de velocidad hizo que cazaran a Meier, el único de los fugados que permanecía por delante, al pasar por la pancarta de dos kilómetros a meta. El de Pinto no ayudaba al británico, a pesar de sus peticiones, y Froome escuchó por detrás las bicicletas de sus rivales, que llegaban al grupeto gracias a un excepcional esfuerzo de Moreno en favor del líder.

El segundo del Tour quería continuar poniendo un ritmo duro, toda vez que el líder había dado muestras de debilidad y su coequipier, Dani Moreno, se había sacrificado de manera íntegra por los intereses del andorrano. Las dudas por seguir el ritmo alto se disiparon en el instante en el que Purito efectuó un cambio, al que se unió Contador y, con más dificultades, Froome y Valverde, que contactaron a uno de meta.

Pero la carrera estaba lanzada y aunque tanto Beñat Intxausti como Igor Antón se esforzaban por capturarles, Contador atacó a unos setecientos metros y su demarraje hundió a Froome, que se sentó en el sillín, y vio como Purito y Valverde, que al principio se quedaron junto a él, le abandonaban en pos del pinteño, cuando restaban trescientos metros. Lo que a menos de doscientos metros parecía un espacio para que Contador alzara los brazos en la Collada se deshizo como azúcar en el agua ante los rabiosos sprints de Valverde y Purito, que se impusieron al pinteño en la curva y, además, le arrebataron las más jugosas  bonificaciones.

En la meta, en un sprint ajustado, venció Valverde, haciendo bueno su toque de fuerza y velocidad en los finales en rampa. Purito mantuvo su maillot de líder y los tres españoles consideraron como buenos los quince segundos arrebatados al inglés Chris Froome que se había demostrado como el más ambicioso durante la subida.

De la Gallina, Purito salía primero con una diferencia de 33 segundos sobre Froome, 40 respecto de Contador y 54 sobre Valverde. Moreno, que era sexto, se dejaba ya 1 minuto y 48 segundos. El catalán, prestigiando la Roja, se impondría en las metas de Ézaro y de Ancares y mantuvo su privilegiada posición tanto en la subida a los Lagos de Covadonga (con victoria de Piedra) como en el Cuitu Negro (donde se impuso el italiano Cataldo). Nada le hacía presagiar que su victoria se haría pedazos camino de Fuente Dé. Su tercer puesto, tras Contador y Valverde en Madrid, era un triste consuelo para una Vuelta que tuvo en su mano.

El buen espectáculo ofrecido por la Gallina hizo que la Vuelta lo visitase de nuevo en la edición de 2013, con victoria de italiano Danielle Ratto del Canondale, en un día en la que la lluvia se erigió como protagonista, endureciendo, aún más, el tortuoso perfil de la Collada.

Comentar

Su dirección de correo electrónico no será publicada.Los campos necesarios están marcados *

*