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Vinokourov en la salida de Aranda de Duero
Redacción / Ciclo 21
El equipo Astana es un especialista en caminar sobre un fino alambre. Dependiente siempre del dinero público de Kazajistán, su mánager, el controvertido Alexandre Vinokourov, muestra, una vez más, su preocupación por el futuro. Una sensación que también tiene la Unión Ciclista Internacional por varios de los conjuntos del pelotón. Y en el asiático militan los espoañoles hermanos Luis León Sánchez, los hermanos Ion y Gorka Izagirre, Óscar Rodríguez, Alex Aranburu y Omar Fraile, además del colombiano Miguel Ángel López y el danés Jakob Fuglsang, sus líderes naturales.
«Hacemos todo lo posible con el equipo y los patrocinadores» dice el excorredor en la web cyclismeactu. «En Kazajstán, como en el resto del mundo, es complicado, con el petróleo, la moneda… Tenemos que sobrevivir este año, y si no hay carreras será complicado para el ciclismo. ¿Mi equipo estará en peligro si no hay carreras? Creo que sí, como todos los demás equipos. Los patrocinadores quieren tener visibilidad, y para nosotros sí, si no hay carreras, creo que nuestro equipo desaparecerá el año que viene».
De momento, siempre dependiendo de la evolución del virus, hay un calendario World Tour por delante con las tres grandes vueltas y los cinco monumentos situados en el tiempo. «De todas formas es mejor que nada. Creo que la UCI ha hecho un milagro. Hoy necesitábamos un calendario y había un gran trabajo hecho por el presidente de la UCI y todo el equipo a su alrededor. Todos los grandes eventos como los Juegos Olímpicos o el Europeo han sido cancelados, y para nuestra disciplina es importante correr este año para sobrevivir. Entiendo a todos los organizadores que quieren hacer sus carreras. Va a ser raro tener el Tour de Francia en septiembre y las otras carreras después, pero para los aficionados es bueno porque podrán ver el ciclismo en la televisión».
Jakob Fuglsang en el Giro de Italia y Miguel Ángel López en el Tour de Francia -«quiero ver hasta dónde puede llegar»- son sus jefes de fila inamovibles como así se dibujó a comienzos de la temporada normal. «Vamos a mantener los mismos programas, con López en el Tour y el Fuglsang en el Giro, y los chicos que van a hacer el Tour también podrán hacer las clásicas y los Mundiales. También espero que podamos tener campeonatos mundiales este año porque es muy importante para los corredores y los países. Tendremos que ver también qué pasa con el regreso de los colombianos que están en su país en este momento. Tendremos que ver con las fronteras y deberían volver a Europa en julio. Puede que tengan que pasar 14 días en cuarentena, lo que no sería fácil».
En cuanto a la previsión de las pruebas confirmadas, Vinokourov confía en que el Tour, la primera gran cita, podrá partir de Niza a partir del 29 de agosto podrá llevarse a cabo. «Va a hacer más calor, pero tendremos que respetar las normas sanitarias. ¿Un tour a puerta cerrada»? Es complicado, no veo cómo podemos mantener a la gente en casa. En cualquier caso, creo que habrá menos público porque la gente trabajará, no estaremos de vacaciones, así que habrá menos espectadores en la carretera. El gobierno decidirá con el ASO si debe haber una audiencia, pero pase lo que pase, habrá gente delante de la televisión. Tenemos que sobrevivir este año».
